Reseña literaria “Retando al destino” Estela Pomares.

Ha llegado un día más de reseña, esta vez hemos ampliado nuestro repertorio de autores en el mundo de Wattpad y le ha tocado el turno a la talentosa Estela Pomares con su novela: “Retando al destino”. Esta historia es la primera parte de su trilogía retando y la verdad, con tantos cabos sueltos, ha dejado a las apasionadas literarias con ganas de leer el segundo libro para saber todo de sus protagonistas. Bueno, sin más, les dejo mi opinión.

RESEÑA LITERARIA

Título de la Obra: Retando al destino.

Nombre del Autor (a): Estela Pomares

Género Literario: Romance erótico Juvenil.

Disponible: Wattpad. @Estela2610 https://my.w.tt/eQBtP2ngVV

Sinopsis:

El fuego siempre quema, arde, enloquece… El amor, hace justo lo mismo.

Después de crecer bajo la violencia de su padre, Clarisa, lo único que quiere es confiar en la gente, en los sentimientos y en el mundo. Nada es fácil para ella. Mas no se imagina que está muy cerca de las llamas que tanto ha evitado y que quemarse no es tan doloroso cuando caes en los brazos de Zed: arrogante, orgulloso y petulante, oculto bajo esa imagen poderosa, pero… solo es un alma perdida en las injusticias de la vida.

¿Qué tan malo puede ser enamorarse?

Mi opinión.

Retando al destino es una novela juvenil narrada de forma fluida y nada descriptiva, ni tediosa en primera persona a dos voces por el protagonista masculino y la femenina: Zed Allen y Clarisa Morgan. ¡Sí, mis querid@s apasionad@s!, conoceremos los pensamientos de ambos protagonistas en cada capítulo, eso es algo que me encanta pues siempre he dicho que las historias de amor son como las monedas: tienen dos caras y cada una tiene su perspectiva de los hechos.

Desde la sinopsis, la autora nos da una pincelada de los demonios y uno que otro defecto que atormentan a sus protagonistas. Con tan solo leerla deduje que se trataría del cliché de chico malo - chica buena y con forme fui adentrándome en la trama me di cuenta de que no estaba en un error. Sin embargo, Estela le da un giro de tuerca regalándonos a una protagonista que, si bien es una persona muy sensible y buena, no es la típica inocente que no conoce que el mal está en todos lados. Clarisa carga un pasado bastante doloroso que la ha marcado de maneras muy tristes al igual que Zed, lo que define mucho del carácter que la autora imprimió en ellos.

No es el primer libro de esta temática que leo, así que aunque todo me gritaba que era un amor

toxico y las lágrimas se me escaparían seguí leyendo. Muchas veces me he preguntado si soy masoquista por la adicción que generan estas tramas, pero lo que en realidad me hizo continuar es que, conociendo la pluma de Estela sabía que no me arrepentiría. Ya había tenido el placer de leer a esta autora con “Peligrosa Atracción” uno de sus tantos libros y por lo visto se sabe manejar muy bien en los romances juveniles con sus chicos malos y esas mujeres que descubren que hay algo más que su vida estudiantil.

Tanto Zed como Clarisa, en cada uno de sus capítulos, abren su alma dejándonos ver el porqué de sus temores, obsesiones, acciones y deseos y créanme que esa tensión sexual que se crea entre ellos se palpa desde el primer segundo en que se cruzan. Al ser un romance juvenil, las hormonas mandan sobre la razón de los chicos en el momento y lugar que decidan tomar el control. En verdad Estela sabe transmitir ese erotismo en cada escena sin caer en lo vulgar a pesar de lo candente que es el sexo entre estos locos apasionados que les gusta quemarse en el fuego del deseo.

Pese a que el móvil de esta historia es el sexo y redescubrimiento de ellos mismos en esta nueva relación, las subtramas de acción, peligro y dolor condimentan muy bien la trama haciendo amena la lectura e impulsándote a saber si el mal sobrepasará ese amor que juran tenerse nuestros tortolos. La verdad, en esta ocasión me dolió mucho el maltrato de Clarisa y no crean que fue por parte de Zed, sino por la persona que menos pensaba que pudiera hacerle daño: su padre. Ese maldito mal nacido que goza haciendo el mal, lo odié tanto que yo misma quería retorcerle el pescuezo.

Mientras leía pude sentir todo lo que ha sufrido la pobre chica a manos de ese desgraciado y llegué a comprender sus reacciones, miedos e inseguridades. Lo que me hace pensar que la autora investigó mucho para poder crear el perfil psicológico de una persona que ha sufrido tanto como ella lo hizo y eso es algo de aplaudir porque no es nada fácil transmitir de esa forma.

En cuanto a Zed, desde la sinopsis sabía que no iba a ser mi tipo de hombre, mi naturaleza

melosa sueña con príncipes azules y Mr. Darcy todavía jajaja. Créanme que traté de verlo como mis demás compañera pero no me enamoró. Su lado rudo sí era atrayente pero no lo suficiente como para caer redondita a sus pies, sobre todo por esos arranques controladores que me daban ganas de cachetearlo. Sí, sí lo sé, él lo hacía por el bien de Clarisa, pero soy de la idea de que si amas a alguien no debes imponerle tu voluntad, sea el motivo que sea. Sin embargo, considero que es un buen personaje con sus lados oscuros y sus cualidades muy escondidas.

Espero que en la continuación pueda descubrir más de él y vea que en realidad se merece a esta pobre chica y que ambos puedan sanar y salir de ese embrollo que se creó justo al final. Porque déjenme decirles que nuestra Estela Pomares nos ha dejado con miles de preguntas y cosas sin resolver con la plena intención de que leamos la segunda parte. Así que ya saben mis apasionad@s, si quieren saber todo de estos dos tortolos deben leerse la trilogía entera.

Como no quiero develar secretos de esta novela hasta aquí llega mi opinión y me retiro no sin antes felicitar a la autora deseándole lo mejor en todo lo que escribe y extendiéndole la invitación para que vuelva a transmitirnos tanto con su pluma.